Para conmemorarlo, se realizarán celebraciones en diversos países del este asiático como Japón, Malasia y China, donde en la ciudad de Hong Kong se está realizando una feria dedicada a Doraemon donde se exponen 100 estatuas de tamaño real del personaje (mide 129,3 centímetros de alto y pesa 129,3 kilogramos), cada una con un gadget distinto de los que Doraemon saca de su bolsillo de cuatro dimensiones.
Doraemon es un personaje tan importante en Asia que el gobierno japonés lo nombró embajador y la revista TIME lo sumó a su lista de ‘Héroes Asiáticos’ el 2002, y su trama es que fue enviado desde el futuro a ayudar a Nobita, un niño cuyos problemas académicos en la escuela acarrearon que su familia fuese extremadamente pobre el 2112.
Originalmente Doraemón era amarillo y tenía orejas, pero las perdió en el futuro cuando un ratón robot se las comió, lo que causó que el gato robot llorara desconsoladamente hasta que sus lágrimas quitaron su color amarillo, el que terminó en el reconocido azul. Sin embargo, eso causó que se considerara un robot defectuoso en el futuro, lo que permitió que los descendientes pobres de Nobita pudieran ganarlo en un remate.
El gato robot ayuda permanentemente a Nobita con diversos aparatos futuristas que guarda en su bolsillo tetradimensional, lo que usualmente acarrea más problemas que –tras ser solucionados– terminan en una moraleja. Esta estructura básica de la historia termina explicando cómo los niños han disfrutado al personaje durante las últimas décadas.
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