No obstante, en las cárceles la mayoría de los presos son creyentes, los narcotraficantes en su mayoría lo son, y como muestran cintas como "La virgen de los sicarios" la mayor parte de los asesinos a sueldo también lo son. Aún así en la mente de las personas que desconfían de los ateos es imposible ser bueno si no crees que hay un policía invisible que te vigila a toda hora.
Noticia El Espectador
Las personas religiosas desconfían de los 500 millones de ateos que se estima hay en el mundo tanto como de los violadores, según un estudio divulgado este viernes poco después de una encuesta que afirma que menos de la mitad de los estadounidenses votarían por un presidente ateo.
"Donde hay religiones mayoritarias -esto es, en la mayor parte del mundo- los ateos son las personas en que menos se confía", dijo el autor que dirigió la investigación, un estudiante de doctorado en psicología de la Universidad British Columbia en Vancouver.
El estudio publicado en la edición en línea de este mes del Journal of Personality and Social Psychology (Revista de la Personalidad y de la Psicología Social) encontró que las muestras externas de creer en Dios son interpretadas como un indicador de confianza.
Esto es particularmente cierto para "los creyentes religiosos que piensan que las personas se comportan mejor si creen que Dios está observándolas", explicó la co-autora del estudio, Ara Norenzayan.
"Mientras que los ateos podrían ver su no creencia como una cuestión privada o metafísica, los creyentes podrían considerar la ausencia de creencia atea como una amenaza pública a la cooperación y la honestidad".
Los investigadores recrearon una serie de escenarios e hicieron preguntas hipotéticas a 350 estadounidenses adultos y casi 420 estudiantes en Canadá.
Los participantes en el estudio encontraron la descripción de una persona en que no se puede confiar más representativa de ateos que de cristianos, musulmanes, hombres homosexuales, feministas o judíos. Sólo se desconfiaban de los violadores en un nivel comparable al de los ateos.
Los científicos concluyeron que el principal motivador del prejuicio contra los ateos era la desconfianza de los creyentes religiosos, más que que no les gustasen o les repugnasen.
El estudio se publica poco después de una encuesta Gallup que encontró que sólo el 45% de los estadounidenses que participaron votaría por un presidente que se confiese ateo, el nivel más bajo entre otros candidatos hipotéticos minoritarios. La mayoría tampoco aprobaría que su hijo se casase con un ateo.
"La antipatía es llamativa, ya que los ateos no son un grupo coherente, visible y poderoso", dijo Gervais.
¿Y usted qué opina?