El hombre conoce lo que le rodea por medio de sus sentidos.
Pero la realidad es que nuestro cerebro es propenso a crear ilusiones visuales, auditivas y es incapaz de diferenciar la realidad de las ilusiones que el mismo se crea.
A veces ni siquiera somos conscientes de lo imperfecta que es nuestra manera de pensar y lo fácilmente que nos engaña nuestro cerebro y nos inventamos explicaciones a nuestras experiencias nuevas, reales o no, usando el bagaje cultural que nos hereda nuestro entorno, en cual prácticamente sigue estando al nivel de los que se postraban y rezaban cada vez que restallaba un relámpago en el cielo.
Lo ideal seria racionalizar y analizar lo que nos es desconocido, esgrimir el método científico en la vida cotidiana.
Piergiorgio Odifreddi, Elogio de la impertinencia... la mayoría de nosotros debería saber perfectamente que el mundo está regulado por leyes mecánicas, termodinámicas, electromagnéticas, nucleares, químicas y biológicas a las cuales apelamos, directa o indirectamente, de manera constante.
| E.