En el mismo canal donde en la novela los morenos son los sirvientes y los güeritos son los patrones, me dicen que los indígenas son nuestros hermanos y que tengo que ayudar…
Me imagino al creativo, sentado en su oficina con el encargo de algún funcionario de gobierno, pensando en la manera de sensibilizarnos a todos para enviar una ayuda que ellos olvidaron dar hace muchos años. Ahora su labor es buscar palabras como “nuestros hermanos” para que se nos prenda el foco, para convencernos de que no son esos “pinches indios” que vemos mendigando todos los días en la calle.
“Ni que yo fuera un pinche indio bajado del cerro” me dijeron una vez. Recordé y siempre recuerdo cuando escucho eso, una fotografía de mi padre parado frente a una pequeña choza de lamina. Fue el año que mi abuelo bajo de Campo Morado, Guerrero para encontrar una vida mejor en el DFectuoso. El indio bajado del cerro…
Me da miedo que millones de personas se sentaron a ver la novela y sin problema alguno la disfrutan sin ver lo evidente, que esa novela es la que disfraza el clasismo y racismo. Ese que hasta cierto punto vivimos todos los días. Y después, el comercial y el mensaje de hermandad. Hazme el chingado favor.
¿Racismo disfrazado de solidaridad?
Al parecer los indígenas mexicanos necesitan sufrir de hambre y de heladas para que automáticamente pasen de ser un pinche indio a ser mi hermano indígena.
Cierto, ahí si nos conmovemos, pero no lo mande dios verse o parecer “indio”.
Liga directa: youtube.com
| Racismo disfrazado de solidaridad:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Todo comentario es sujeto a moderación. Piensa antes de enviar.