Un joven lavianés de 28 años permanece ingresado en la UCI del Hospital Central de Asturias aquejado de un traumatismo craneal severo causado al golpearse brutalmente contra el suelo al ser manteado por los invitados de su propia boda. El trágico suceso tuvo lugar a las 11 de la noche del pasado sábado en el restaurante La Torre, en Pruvia, durante la celebración de su enlace matrimonial.
En un momento de la fiesta, Manuel López Fernández, originario de Llorío, fue cogido en brazos por unos amigos y familiares con el objetivo de lanzarlo por los aires como símbolo de la exaltación de lo vivido. La mala suerte quiso que la broma se les escapase de las manos y el novio acabase impactando contra el piso. Todos los que presenciaron la escena se quedaron helados. El día de felicidad se tiñó de pánico en tan solo un segundo. El joven permanecía inmóvil en el suelo, sangrando por los oídos.
Hasta el restaurante en el que se celebraba el banquete se trasladaron rápidamente los efectivos del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU). En el mismo momento en el que vieron el estado de la víctima, se percataron de la gravedad de las lesiones. Presentaba un traumatismo craneoencefálico severo, acompañado de otorragia.
Intervención policial
Fue llevado inicialmente al centro sanitario de Lugones, el más cercano a La Torre, y desde allí derivado de forma inmediata al Hospital Central de Asturias, en Oviedo. En la sala de espera del área de Urgencias se personaron muchos de los invitados al enlace. El nerviosismo era tal que varios de los presentes se enzarzaron en una acalorada discusión que a punto estuvo de llegar a las manos. Tanto fue así que incluso tuvieron que acabar interviniendo agentes del Cuerpo Nacional de Policía para pacificar la situación.
Los familiares del joven se muestran confiados en su pronta recuperación. Las últimas conversaciones mantenidas con el equipo médico que lo atiende en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) les hace tener esperanzas, tal y como explicaron personas allegadas que, sin embargo, quieren ser cautas. «Con estas cosas de la cabeza no se sabe y hay que ir despacio, pero parece ser que el coágulo de sangre que tenía va remitiendo. Aún es pronto para saber si le quedarán secuelas», señalan.
El trágico accidente ha conmocionado el concejo de Laviana, de donde son naturales los dos contrayentes. La familia de la novia regenta una conocida confitería en la localidad de Pola de Laviana. Hasta el negocio se han acercado en los últimos días muchos allegados para interesarse por el estado de salud de Manuel López.
En el pueblo de Llorío, de donde es el herido, no se hablaba de otra cosa: «Es una desgracia. No sabes dónde la tienes. Te levantas todo contento porque te casas y acabas entre la vida y la muerte en un hospital», lamenta uno de los vecinos del joven. «La que peor lo está pasando es la novia. La pobre, encima, lo vio todo y no olvidará ese día en la vida», añade.
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